Argentina es uno de los países que presentan uno de los ecosistemas empresariales más dinámicos de América Latina. Pese a la incertidumbre económica a la que se vio sometida desde finales de los 90s, este país se mantuvo en el camino hacia el éxito.
La falta de un marco legal adecuado que permita a las nuevas empresas obtener capital impulsó a que, el mes pasado en Argentina, el Senado votara por unanimidad para aprobar la legislación que respalde el crecimiento de la actividad empresarial en el país. Para Marta Cruz, co-fundadora y managing partner del fondo de capital emprendedor Nxtp-Labs, este es un gran paso que permitirá alcanzar el éxito de manera más fácil.
Con el fin de aliviar las cargas burocráticas que los empresarios deben soportar, y con el respaldo de la Asociación de Empresarios Argentinos (AEA) y la Asociación Argentina de Capital Privado, Emprendedor y Semilla (ARCAP), la nueva legislación reemplaza los antiguos procedimientos de solicitud, aprobación y financiación que tomaba hasta un año para que los empresarios terminaran antes de que pudieran lanzar legalmente sus compañías.
El presidente Macri, busca impulsar la economía y llevar al país nuevamente al mercado global, para lo cual el gobierno dio un paso importante para la creación de herramientas que permitan producir, crear valor, innovar y competir dentro del país y en el mundo, de acuerdo a Cruz.
La aprobación de la Ley de Emprendedores se da en un momento fundamental para Argentina. Para lograr comprender en su totalidad el significado de la Ley de Empresarios es esencial entender el difícil y resistente restablecimiento del pasado empresarial argentino, dice Cruz.
Actividad empresarial
La historia de los emprendimientos en Argentina comienza en la década de 1990 cuando, después de años de alta inflación, el gobierno lanzó nuevas iniciativas para reabrir el país. Este período coincidió con “la burbuja punto com” de los años noventa.
Es en esta década, cuando Buenos Aires se convirtió en un punto de partida para algunos de los empresarios más exitosos de la historia del país. Se estima que el 70% del capital de riesgo disponible en América Latina se concentró en la capital Argentina. También, fue durante este tiempo que las primeras empresas de Internet del país tuvieron su comienzo.
Desafortunadamente, la década de 1990 terminó mal en Argentina, y el país entró en una fuerte crisis económica, enfrentando una severa devaluación de la moneda y fracasó en sus deudas públicas en 2001. Desde entonces, Argentina es un país con un gran potencial en cuestión económica y de recursos que se suma a las tendencia del emprendimiento con grandes éxitos pese a su vulnerabilidad y ciclos económicos, los empresarios se enfrentan a un entorno empresarial difícil, resignados a una constante escasez de capital.
La “Ley de Negocios en un Día”, impulsada en Chile en el 2014, permitió a los empresarios chilenos iniciar un negocio en un solo día y completar todos los trámites necesarios y requisitos de registro en línea. Esta ley se convirtió en referencia para los empresarios argentinos.
Con la nueva norma, la administración nacional busca facilitar la constitución, promoción y el crecimiento de pequeñas empresas en el territorio nacional. La principal novedad que introduce es que los emprendedores podrán crear empresas en menos de un día. Además la ley aborda los siguientes aspectos: Fast-track para registro de empresas; nuevos canales de financiación; y mayor soporte para aceleradores y plataformas crowdfunding.